Decorar un salón es un proceso divertido y creativo. Puedes hacerlo a tu gusto o inspirarte en otros salones que hayas visto en revistas o en la televisión. Vamos a intentar darte unos pequeños consejos para la decoración y poder darle a tu hogar el mejor aspecto.
Compra de muebles
Lo primero que tienes que hacer es decidir qué tipo de muebles quieres en tu salón. ¿Va a ser grande y espacioso, o acogedor y pequeño? ¿Va a haber sofás y sillas, o solo un gran sofá? ¿Quieres sillas con brazos o sin brazos? Hay muchas maneras de hacerlo, así que puedes elegir el estilo que más te convenga.
Principalmente, no deberías comprar demasiados muebles. El minimalismo es una opción, pero la sensación de amplitud que se genera con menos muebles, es mucho mejor, que tener una sensación de agobio trasmitida por el exceso de muebles.
Con unos pocos muebles se pueden hacer muchas cosas. Hay un millón de combinaciones diferentes que puedes utilizar para crear un espacio que sea exclusivamente tuyo, y nosotros te vamos a enseñar cómo hacerlo, con nuestros mejores consejos e ideas.
Comprar todos juntos o por separado
Te habrás dado cuenta de que algunas tiendas venden los salones como un conjunto, mientras que otras te obligan a comprar todas las piezas por separado. La gran pregunta es: ¿qué es mejor? La respuesta es: ¡depende! Si quieres el aspecto de una habitación entera de una sola vez, probablemente lo mejor sea comprarlo todo a la vez. Sin embargo, si quieres más variedad o no tienes suficiente dinero para comprarlo todo de una vez, comprar las cosas por partes podría ser mejor para tu presupuesto y darte más flexibilidad con el tiempo. En definitiva, depende de lo que mejor se adapte a tu situación.
Consejos para comprar muebles
- Elige muebles que se adapten al espacio y a tus necesidades. Si tienes niños, te conviene encontrar muebles duraderos y fáciles de limpiar. Si tienes poco espacio, busca piezas con almacenamiento oculto: ¡incluso puedes conseguir cajones que se desprendan de la pared!
- Añade algunas plantas o flores de diferentes colores y tamaños alrededor de la habitación para que parezca más viva que tener unas cuantas macetas con plantas colocadas una frente a otra en una esquina de la habitación (que es lo que hacen cuando no están decorando).
- Si tienes niños que van a pasar tiempo en este espacio, asegúrate de que no haya nada peligroso al alcance, como esquinas afiladas u objetos rompibles como jarrones llenos de agua (que podrían derramarse sobre los aparatos electrónicos).
- Termina con toques como cojines o alfombras que aporten calidez y color a un entorno que de otro modo sería anodino.
Los cuadros decorativos dan un toque diferente
Tener cuadros decorativos le da un toque diferente
¿Qué es una sala de estar sin algo de arte? Tanto si buscas una pieza que complemente tu decoración actual como si empiezas desde cero. Aquí tienes algunos consejos para elegir la pieza adecuada:
– No compres algo que desentone con los muebles que ya tienes. Si no hace juego, no quedará bien.
– Asegúrate de que encaja con el resto de la decoración: un cuadro de una escena de playa no quedará bien en una pared junto a un cuadro abstracto de frutas.
– Cuando cuelgues los cuadros, procura no hacerlo ni demasiado alto ni demasiado bajo en la pared. Si los cuelgas demasiado altos, parecerán más pequeños de lo que son en realidad, y si los cuelgas demasiado bajos, parecerá que flotan por encima de todo lo demás en la habitación (lo que puede ser genial a veces).
Conclusión
Decorar un salón no es tarea fácil, de hecho, es seguramente el espacio del hogar donde más tiempo pasarás y debes sentirte bien. Además, debe gustarte, e intentar que guste también al resto de la familia (aunque eso puede ser secundario), párate a pensar bien como lo organizarás y tómate el tiempo necesario, no hay prisa.
Si lo planeas bien y lo haces con el tiempo necesario, se traduce en una tarea con mucha ilusión y si obtienes el resultado final adecuado, bastante satisfactorio.